Devocionales

Confesiones poderosas

Escrito por Angelina Gómez Corrales para CBN
“[…que, si confiesas con tu boca, que Jesús es el Señor, y crees en tu corazón que Dios lo levantó de los muertos, serás salvo”. Romanos 10:9 (NVI).

En la Biblia nos encontramos la historia de Ruth que, además de ser cautivadora, nos deja una lección poderosa para imitar. Fue una joven extranjera que decidió dejar su tierra natal para acompañar a su suegra Noemí’ a Belén, en Israel. 

Después de la mucha insistencia de Noemí para hacerla regresar a su tierra, Ruth se negó rotundamente, y declaró las siguientes palabras que cambiaron su propio destino: “

No me ruegues que te deje, y me aparte de ti, porque adonde quiera que tu fueres, iré yo, y donde quiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios, y solo la muerte nos separará”. Ruth 1:16(NVI).

Ruth no solo tomó la decisión de no abandonar a su suegra, sino que declaró aceptar al Dios de Israel como su propio Dios.
Esta joven fue diligente, trabajadora, venció obstáculos por vivir en otro pueblo y además, con sus palabras y acciones generosas alcanzó el favor del Dios de Israel.

A veces tenemos que tomar decisiones muy importantes y sabias y solo con la ayuda del Espíritu Santo lo lograremos. Sin embargo, la decisión más importante de nuestras vidas es la de recibir la salvación eterna que Dios nos regaló a través de su Hijo, quien pagó el precio por nuestros pecados en la cruz.

Si no has tenido la experiencia de tener una relación personal con Dios, y deseas ser su hijo, acepta a Jesús en tu corazón, y esta sencilla oración cambiará tu vida y tendrás un nuevo comienzo, andando en sus caminos y haciendo su voluntad.

Oración: Señor Jesús, te recibo como mi Señor y Salvador personal, me arrepiento de todos mis pecados, hazme una nueva persona y lléname con tu Santo Espíritu, amén.